Catecúmenos entran etapa final antes del bautismo
Para Echo Sullivan, era la fe de su esposo fallecido que iba guiándola a la Iglesia Católica. Sullivan fue una de 600 catecúmenos que abarrotaron la Catedral SS. Simón y Judas para el Rito de Elección el 18 de febrero.
Por años Sullivan, una catecúmena de la Parroquia Nuestra Señora de Guadalupe en Queen Creek, iba buscando otras religiones, pero todavía siempre fue a Misa con su esposo, quien falleció el 11 de enero. Cuando decidió entrar a la Iglesia, dijo que su esposo, quien era un monaguillo cuando era joven, la acompañaba a sus clases de RICA.
“Siempre era parte de la Iglesia”, dijo Sullivan. “Venía a las clases también. Él dijo que sabía que eran cambios en la Iglesia, pero quería aprender sobre esos cambios, y que en 60 años, era algo que habia olvido. Por eso, era interesante para él, también”.
Que ultima traje Sullivan era la historia de la Iglesia. “Tiene documentos historicos, empezando del principio”, dijo. “Hay una historia establecida, no es una historia reciente”.
El Rito de Elección es el momento cuando los catecúmenos — preparandose para entrar la Iglesia, pero no han sido bautizados — son presentados al obispo, quien reconoce que son llamados por Cristo. Esta presentación ocurre en forma de sus nombres inscritos en el “Libro del Elegido”, que cada parroquia trae para que el obispo lo pueda firmar, una referencia al “Libro de la Vida” encontrado a través del Apocalipsis, dijo el P. John Muir, director asociado de la Oficina del Culto.
“En este rito, puedes ver que tan serio lleva la Iglesia el llamado del bautismo, … como nos vemos como una participación en la muerte y resurrección de Cristo”, dijo el P. Muir. “Ser llamado es el momento más significante que le puede pasar a un ser humano en su vida, como hacer una creación nueva”.
El rito ocurre en el principio del tiempo Cuaresma, dijo el P. Muir, para que los catecúmenos puedan entrar en un “periodo intenso final de purificación” que culmina en el bautismo y confirmación durante la Vigilia Pascua.
“Para llegar a la meta de la vida nueva en Cristo, la Iglesia ofrece a ustedes 40 días de la Cuaresma, esto es un periodo de especial intensidad, tiempo de oración, de penitencia y de preparación espiritual al encuentro con Jesús”, dijo el Obispo Thomas J. Olmsted en su homilía.
Reflexionando sobre las palabras de Jesucristo a sus discípulos — “No tengan miedo” — el obispo alento a los catecúmenos durante este tiempo.
“En estas últimas semanas antes de recibir nueva vida en Cristo en el Bautismo, tal vez sentirán dudas y temores; y el Diablo tratara de desanimarlos,” dijo el Obispo Olmsted. “Yo repito las palabras de Cristo: ‘No tengan miedo’. Porque el Señor esta siempre cerca de cada uno de ustedes. Donde está Dios, allí está la paz. El Señor les dará el valor que necesitan a cada paso de este camino de la fe”.
La Hna. María Madre de la Sabiduría, miembro de las Servidoras del Señor y la Virgen de Matará, dijo que es el llamado de Dios que trae a los catecúmenos a entrar la Iglesia.
“Pero que en el momento, cada persona tiene un momento especial donde siente ese llamado”, dijo la Hna. Sabiduría, quien trajo 13 catecúmenos de la Parroquia San Antonio. “Todos los catecúmenos, que están presentes hoy de mis iglesias, han sentido esa cercanía de Dios solo para responder al amor que ya enjutado y que quiere que se hacía crecen”.
El Diacono Lorenzo McKnight, director de ministerios litúrgicos en la Parroquia San Agustín, presento 51 catecúmenos durante el rito. También un convertido, el Diacono McKnight dijo que era el ejemplo de otros cristianos que inspira la fe en otros. “Fue casado en una familia católica”, dijo. “Era por ejemplo que empiezo a preguntar y quería hacer parte que lo vi”.
Reflexionando sobre su experiencia, el Diacono McKnight ofrezcio este aviso a los elegidos: “Continuar manteniendo sus ojos enfocado en el Señor. Continar estudiando. Continuar rezando y meditarando, y ven a saber más y más sobre nuestro Señor. Él tiene cosas maravillosas para nosotros y todo lo que necesitamos hacer es buscarlo a Él, y lo encontramos”.